Regulador mexicano autoriza planes exploratorios de Pemex

La Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH) de México aprobó el plan de exploración presentado por la petrolera estatal Pemex para el área de aguas someras N°8 de Cuencas del Sureste, la cual se adjudicó a través de un consorcio con la petrolera estatal colombiana, Ecopetrol, en la ronda 2.1.

El plan considera dos alternativas dependiendo del éxito de la exploración. El plan A demandaría US$17,4mn en inversiones e incluiría estudios geofísicos y geológicos, mientras que el plan B contempla US$76mn y considera además la perforación de un pozo en 2021.

El Área 8 está rodeada de otras en manos de ENI, Repsol, Capricorn Energy, Deutsche Erdoel y Pemex. Según datos de la CNH, contaría con 18,8 millones de barriles equivalentes de petróleo (Mbep) en reservas P90, 89,4Mbep en reservas P50 y 413Mbep en reservas P10.

Pemex recibió también autorización para modificar los planes de desarrollo del campo terrestre Ayocote y el campo de aguas someras Amoco-Yaxché.

El campo Ayocote produjo 6.300b/d de crudo y 6,1 millones de pies cúbicos diarios (Mpc/d) de gas natural en agosto. El plan modificado especifica una inversión de US$91mn entre 2018 y 2034 para mejorar la tasa de recuperación de 34% a 58% para el crudo y de 29% a 33% para el gas.

La modificación del plan de desarrollo para el campo Amoco-Yaxhé considera dos escenarios posibles. En el primero, se invertirían 4.600mn de pesos (US$240mn) en la perforación de tres pozos y siete estudios exploratorios. De lograrse éxito, se invertirán 3.300mn de pesos adicionales en otros cuatro pozos y 12 estudios exploratorios.

En noticias relacionadas, la firma estadounidense de servicios Petrofac completó la venta, anunciada en julio, del 49% de sus operaciones mexicanas a Perenco Oil & Gas por US$200mn, a lo que sumaría US$74mn adicionales de lograrse ciertos hitos. Las participaciones de Petrofac incluyen los campos Santuario, Magallanes y Arenque. El campo Santuario es una de las cuatro migraciones exitosas completadas por Pemex en las que un contrato de servicios anterior a la reforma energética se convirtió en un contrato más favorable enmarcado en la reforma energética vigente.