Las lecciones del COVID-19 para las políticas de cambio climático

Los efectos de la pandemia de COVID-19 en la economía servirán como lecciones sobre el daño económico y financiero que el cambio climático podría causar.

"Ambos son riesgos no financieros, pero tienen efectos sistémicos tanto a nivel de economía real como de mercado financiero", dijo Gianleo Frisari, especialista sénior en cambio climático del BID durante un seminario web.

Además, ambas crisis son no estacionales, en el sentido de que su evolución no es lineal, y sus impactos son regresivos en el sentido de que afectan a las poblaciones más vulnerables.

Frisari advirtió que las vulnerabilidades creadas por la crisis COVID-19 podrían amplificar los efectos de los eventos relacionados con el cambio climático.

Sin embargo, la principal diferencia es que la pandemia plantea un riesgo inmediato y deja poco espacio para los preparativos, mientras que la preparación para el cambio climático es posible.

"Estamos viendo cómo está cambiando la perspectiva de muchas instituciones financieras", señaló Frisari, quien mencionó una encuesta de BID/Reuters del mes pasado entre inversionistas europeos y norteamericanos que en su mayoría había comenzado o planeaba comenzar a realizar un análisis ambiental, social o de riesgos de gobernanza en mercados emergentes.

El ejecutivo también destacó que América Latina ha avanzado con el financiamiento verde, mientras que el banco incrementado sus fondos relacionados con el cambio climático, con un objetivo de 30% de las operaciones totales para 2023.

El BID, según Frisari, diseña actualmente un programa de movilidad eléctrica para facilitar el transporte público, que es "central para ambas" crisis.

"En el BID apoyamos muchas ciudades para repensar cómo reorganizar el transporte", manifestó a BNamericas.