Gobierno brasileño considera postergar OPI y subastas

El Gobierno de Brasil admitió que, si el mercado no se recupera, postergará las OPI de Caixa Seguridade e IRB Brasil Re (IRB), además de las subastas de las centrales hidroeléctricas que no hayan renovado sus concesiones, hasta que se reponga de su actual desaceleración, según Valor Econômico.

Debido a que los ingresos de estas operaciones están incluidos en los ajustes fiscales de este año y son necesarios para alcanzar el objetivo de superávit fiscal de 0,15% del PIB, el gobierno tendrá que anunciar un nuevo conjunto de modificaciones presupuestarias si no puede disponer de estos fondos.

"Mi proyección para el balance fiscal de este año no consideró [estas dos] OPI, pues las condiciones del mercado podrían impedir que el gobierno avance con el proceso, y por eso es que esperamos un déficit primario de 0,3% este año, frente al objetivo gubernamental de 0,15%", señaló a BNamericas el analista de Barclays, Bruno Rovai.

"Si se sigue adelante con las subastas, las tasas de interés implícitas en los proyectos tendrían que ser mayores para reflejar la curva de rendimiento más amplia, la menor disponibilidad de recursos bancarios públicos y los más altos costos de financiamiento, sobre todo tras perder el grado de inversión. La posibilidad de postergaciones] dependería entonces, de si el gobierno acepta o no dicha condición", añadió el ejecutivo.

Las subastas de centrales hidroeléctricas están programadas para el 30 de octubre, lo que significa que el gobierno volverá a evaluar la situación del mercado cuando se acerque la fecha. El mismo curso de acción se seguirá respecto de las OPI de IRB y Caixa Seguridade.

Brasil espera que la OPI de Caixa Seguridade mejore la gobernabilidad de Caixa Econômica y su competitividad en la industria de seguros, mientras que la OPI de IRB permitirá al gobierno retirarse de este particular mercado. Estas ventas se consideran parte de los ajustes fiscales y la estrategia de crecimiento de la nación sudamericana.

La OPI de Caixa Seguridade debiera aportar 3.000 millones de reales (US$709mn), en tanto que la de IRB recaudaría 1.800mn de reales. Si la OPI y las subastas de las centrales hidroeléctricas se postergan, el gobierno podría perder alrededor de 16.000mn de reales este año.