Un vistazo a las estimaciones de inversión de la boliviana Ende

El presupuesto de inversión inicial de la eléctrica estatal boliviana, Ende, para 2022 asciende a 3.100 millones de bolivianos (US$450 millones), según información recién publicada por el operador.

La mitad del gasto planificado, una partida de 1.590 millones de bolivianos, se destinará a generación, seguida de transmisión (815 millones de bolivianos) y distribución (697 millones de bolivianos).

La inversión en Ende matriz corresponde al 56%, y el resto se reparte entre sus filiales: Transmisión (25%), Elfec (7%), Delapaz (5,5%), Corani (2,87%), Deoruro (2,27%), Guaracachi (1,21%) y Delbeni (0,79%).

El plan de proyectos priorizados de generación de este año incluye a las hidroeléctricas Ivirizu (290MW, en la foto) y Miguillas (204MW); los parques eólicos Ventolera (24MW) y Warnes II (21MW); la planta piloto geotérmica Laguna Colorada (5MW); y los proyectos de ciclo combinado Warnes (320MW), Entre Ríos (360MW) y Del Sur (320MW).

Mientras tanto, las hidroeléctricas en etapa inicial de preinversión incluyen a Banda Azul, Cañahuecal, Cuenca Media del Rio Grande, Icona, Juntas Corani y Santa Bárbara, además de 310MW de potencial solar.

En el frente de transmisión, las obras prioritarias son las líneas de 500kV Carrasco-Brechas y Carrasco-Santiváñez, la línea de 230kV Los Troncos-Guarayos-Trinidad, el Anillo Energético del Sur de 230kV, la línea de 115kV Tarija-Angostura-Bermejo, y la conexión de 115kV para interconectar Camiri con la red nacional.

En 2022 Ende pretende terminar la línea de 132kV Juana Azurduy de Padilla, que tendrá capacidad para despachar 120MW a Argentina.

Por otro lado, la infraestructura de distribución prioritaria contempla la adición de subestaciones y casi 70km de líneas, además de alrededor de 2.700km de redes de electrificación rural.

Otras áreas de enfoque para Ende son generación distribuida, electromovilidad e hidrógeno verde.

Fuente: Ministerio de Hidrocarburos y Energías