Ambigüedad sobre política fiscal de Lula inquieta a analistas

Las posibilidades que la tasa de interés referencial de Brasil, Selic, se mantenga alta durante 2023 han aumentado, ya que los inversionistas aún no están seguros de la política fiscal del nuevo gobierno del presidente electo Luiz Inácio Lula da Silva.

“Hay un claro deterioro de la percepción de los agentes del mercado sobre la trayectoria fiscal del país a partir de 2023. Hay una gran falta de información del gobierno electo sobre sus planes para aumentar los ingresos fiscales y reducir la deuda”, dijo Jason Vieira, economista en jefe de la firma brasileña de gestión de activos Infinity Asset, en conversación con BNamericas.

"El empeoramiento de esta percepción se refleja en las expectativas de los economistas sobre la trayectoria de la tasa de interés”, agregó. “Hay un creciente número de economistas que ahora creen que la tasa Selic se mantendrá alta por más tiempo e incluso que se mantendrá sin cambios el próximo año".

La Selic se encuentra en 13,75%, lo que se compara con el 2,0% de principios del año pasado, luego de haber subido durante 2021 y 2022 porque el Banco Central intentaba frenar la inflación.

Según la última encuesta semanal de la autoridad monetaria a 100 economistas, ahora se proyecta una tasa base de 12,0% al cierre de 2023 frente al 11,5% anticipado hace un mes.

Además de la falta de información sólida sobre los planes fiscales del gobierno, el nombramiento de Fernando Haddad para que lidere el Ministerio de Hacienda en la administración de Lula ha socavado la confianza de los inversionistas.

Haddad, profesor de Ciencias Políticas en la Universidade de São Paulo, tiene una licenciatura en Derecho, una maestría en Economía y un doctorado en Filosofía. Fue alcalde de la ciudad de São Paulo y es considerado un aliado cercano de Lula. También podría ser uno de los posibles candidatos presidenciales por el Partido de los Trabajadores en las elecciones de 2026, pues Lula ya declaró que no planea postularse para la reelección.

El hecho de que Haddad tenga un perfil más político que técnico le obligará a trabajar duro para convencer a los inversores de que actuará con prudencia fiscal. Uno de los principales puntos de la campaña electoral de Lula fue que su gobierno gastaría más en programas sociales, lo que preocupa a los observadores con respecto al manejo de las frágiles finanzas públicas del país.

El desempeño económico de Brasil resultará afectado si las tasas de interés se mantienen altas. Después de un crecimiento proyectado de 3,04% para este año, se prevé una expansión económica de apenas 0,79% en 2023, según los analistas encuestados por el Banco Central.