Bajo la lupa: la privatización de la brasileña ES Gás

La venta de la distribuidora de gas brasileña ES Gás no debiera superar significativamente el valor mínimo de 1.300 millones de reales (US$250 millones) establecido en el concurso de privatización, cuya celebración está prevista para el viernes. 

“No parece ser un negocio con tanto potencial”, dijo a BNamericas una fuente familiarizada con el tema.

ES Gás es responsable de la distribución de gas natural por cañería en el estado de Espírito Santo y opera en los segmentos residencial, comercial, industrial, automotriz, de aire acondicionado, cogeneración y termoeléctrico, totalizando más de 74.328 unidades de consumo.

Su control está en manos del gobierno de Espírito Santo, que posee el 51% del capital votante de la empresa, y de Vibra Energia (49% del capital votante y 60,34% del capital total).

La privatización apunta a mejorar la calidad de la distribución de gas natural e impulsar la inversión en infraestructura.

Compass Gás e Energia era uno de los principales candidatos para comprar ES Gás, pero, según el medio local de noticias Estadão Broadcast, la empresa desistió de presentar ofertas.

Compass, parte del grupo Cosan, es propietaria de las empresas Comgás y Sulgás de los estados de São Paulo y Rio Grande do Sul, y del holding de distribución de gas Commit (anteriormente Gaspetro).

Los compradores potencialmente interesados incluyen a la colombiana Promigas y al productor local de petróleo y gas Imetame Energia.

Promigas es el mayor actor de transporte y distribución de gas en Colombia y Perú.

“Brasil es mucho más grande que cualquiera de sus mercados, y podría tener sentido aterrizar aquí”, señaló la fuente.

Imetame posee varios activos de exploración y producción de petróleo y gas, además de proyectos de generación eléctrica a gas natural, en Espírito Santo y el vecino estado de Bahía.

También producen gas en Espírito Santo Seacrest Petróleo, 3R Petroleum, Origem Energia, BGM Petróleo, Mandacaru Energia y Vipetro, pero sería sorprendente verlos competir por ES Gás, ya que están enfocados esencialmente en el negocio upstream.

Mientras tanto, el mayor productor de petróleo y gas de Brasil, Petrobras, se retiró del segmento de distribución de gas y está vendiendo sus campos de Espírito Santo, y Shell ha visto disminuir su producción en Parque das Conchas en los últimos años.

PANORAMA

Otras distribuidoras estatales de gas que podrían ponerse a la venta en el corto o mediano plazo en Brasil son Compagás, de Copel, en el estado de Paraná; y Gasmig, en caso de que se privatice el holding Cemig de Minas Gerais.