Bajo la lupa: proyectos de refinación en Brasil

Brasil tiene varios proyectos de refinación en marcha que ejecutan tanto empresas privadas como la estatal Petrobras.

Noxis Energy planea instalar refinerías en los estados de Ceará, Sergipe y Bahía, cada una con capacidad para producir unos 100.000b/d de derivados de petróleo, principalmente combustibles marinos.

La primera de las tres plantas modulares recibió en diciembre la autorización del regulador local de petróleo y gas, ANP, para su construcción en el puerto y complejo industrial de Pecém, en Ceará.

Los proyectos dependen de mejoras de infraestructura en los puertos de Pecém, Barra dos Coqueiros (Sergipe) y Bamin (Bahía), que hoy por hoy no pueden recibir buques Suezmax.

Cada refinería debiera requerir una inversión de entre US$1.300 millones y US$1.500 millones.

"Brasil es uno de los mejores lugares del mundo para invertir en refinación porque tiene producción de petróleo y demanda de combustible", dijo el presidente ejecutivo de Noxis, Gabriel Debellian, en conversación con BNamericas.

Debellian destacó que, en el futuro, la empresa podría incorporar a las plantas producción de metanol verde y azul, y capacidad de captura de carbono.

“Al final del día, estas serán instalaciones de producción de energía ya preparadas para la transición energética”, afirmó Debellian.

Acelen, parte del grupo Mubadala, anunció recientemente un plan de inversión a 10 años valorado en 12.000 millones de reales (US$2.400 millones) para producir 1.000 millones de litros al año de combustibles renovables.

El enfoque principal será el diésel renovable y el queroseno de aviación sostenible, que se produce a través del hidrotratamiento de aceites vegetales y grasas animales.

La empresa, propietaria de la refinería Mataripe, en el estado de Bahía, espera iniciar la producción en el primer trimestre de 2026.

La planta la compró en 2021 a Petrobras, que representa alrededor del 80% de la capacidad total de procesamiento nacional de 2,46 millones de barriles diarios (incluida la planta de Lubnor, cuya venta a Grepar Participações está siendo analizada por el regulador antimonopolio CADE).

La estatal prevé invertir US$7.300 millones en el sector de refinación hasta 2027, que comprende proyectos de expansión y/o modernización en Abreu e Lima (Rnest), Paulínia (Replan), Duque de Caxias (Reduc), Henrique Lage (Revap) y Presidente Bernardes (RPBC).

Su actual plan de negocios prevé una inversión de 600 millones de reales en un programa de biorrefinación enfocado en el desarrollo de combustibles más modernos y sostenibles en las refinerías RPBC, Presidente Getúlio Vargas (Repar), Reduc y Replan.

Petrobras también planea instalar una refinería de lubricantes de 12.580b/d en el polo Gaslub, en el estado de Río de Janeiro, con tecnología provista por Chevron Lummus Global.

En tanto, estudia ajustes para el coprocesamiento de diésel renovable en las refinerías Gabriel Passos (Regap) y Rnest, informó este lunes la empresa.

También se evaluarán nuevas plantas dedicadas a la producción de R100 Diesel, con materias primas 100% sustentables, en Rnest y en Gaslub, que podrán ampliar su alcance para producir productos petroquímicos de segunda generación, agregó Petrobras.

Oil Group Investments también tiene planes para construir cuatro refinerías modulares con capacidad para procesar hasta 20.000b/d en las regiones sureste y noreste y dos minirrefinerías (capacidad de hasta 5.000b/d) en las regiones centro-oeste y noreste.

En 2020, la empresa firmó acuerdos con Porto do Açu y Energy Platform (EnP) para instalar plantas en el complejo Portuario de Açu, en Río de Janeiro, y el proyecto del puerto Porto Central, en Espírito Santo.

En Açu, la idea es construir una planta modular enfocada en la producción de productos ligeros, con una inversión de US$300 millones.

Los emprendimientos de Porto Central incluyen una planta de 30.000b/d capaz de producir gasolina, búnker diesel y combustible residual y una planta capaz de producir 1.000b/d de lubricantes y 500t/d de asfalto.

BNamericas se comunicó con Oil Group Investments para saber más sobre la situación actual de los proyectos, pero la empresa no respondió de inmediato.

Atem Distribuidora, que compró la refinería de Manaus en el estado de Amazonas, a Petrobras, se negó a comentar sobre sus planes de inversión.