Comunidad se opone a expansión de mina de hierro de brasileña CSN

La expansión de la mina Casa de Pedra, propiedad de CSN Mineração, se enfrenta a la oposición de la comunidad de Congonhas, en el estado brasileño de Minas Gerais.

La empresa recibió todos los permisos ambientales para aumentar la capacidad de producción de mineral de hierro de 10 millones a 15 millones de toneladas anuales, pero la comunidad acusa que esta expansión empeorará la contaminación atmosférica, que ya es intensa.

Las denuncias surgieron durante una audiencia pública organizada por legisladores de Minas Gerais, como Beatriz Cerqueira, del Partido de los Trabajadores, para debatir la aprobación concedida este año por la autoridad ambiental del estado, Copam. Cerqueira puso en duda el proceso de aprobación.

Además, dirigentes comunitarios se quejaron de que la autorización implica un mayor uso de agua, lo que podría intensificar los riesgos de escasez en la zona.

Otra preocupación está relacionada con el riesgo de colapso de una presa de relaves, ya que hay varios vecindarios situados en torno a la estructura.

La expansión es uno de los proyectos de mineral de hierro más grandes de Brasil.

Si bien es poco probable que se revoquen los permisos emitidos, la oposición local podría causar problemas para obtener financiamiento porque los bancos y los inversionistas están más preocupados por las prácticas ESG.

Sin embargo, CSN negó que existan tales riesgos.

En la audiencia pública, el jefe de sostenibilidad de CSN, Eduardo Sanches, dijo que una mayor producción no aumentará el área de impacto del proyecto ni el consumo de agua. Agregó que el agua utilizada para procesar el mineral es filtrada y reciclada y aseguró que se envían periódicamente informes hidrológicos a las agencias estatales.

Sanches destacó además que los relaves se acumulan en seco y que ya no se almacenan en la presa.

Minas Gerais ha sufrido dos grandes desastres relacionados con presas de relaves. Una de ellas colapsó en 2015 en el municipio de Mariana y ocurrió lo mismo en la localidad de Brumadinho en 2019. Los desastres causaron la muerte de unas 300 personas y una grave destrucción ambiental.

Por otro lado, las mineras necesitan excavar cada vez más profundo y producir más relaves porque las leyes minerales están decayendo.

En la foto: Vecinos de Congonhas protestan por la ampliación durante la audiencia pública. Fuente: Asamblea Legislativa de Minas Gerais.