Empresa chilena de aguas en la mira tras recientes problemas de contaminación

Unes derrame de petróleo en una planta potabilizadora —que causó un corte generalizado de agua en la sureña ciudad chilena de Osorno, en la Región de Los Lagos, que se mantenía en curso el lunes— es el último revés ambiental sufrido por la empresa local Essal, que enfrenta ahora una acción legal de las autoridades locales sobre el tema.

La emergencia comenzó el jueves y no se esperaba que la producción de agua se reanudara hasta el martes, dijo el gobernador regional Harry Jürgensen a través de Twitter.

El Ministerio de Salud estimó que 49.000 clientes se vieron afectados y declaró alerta sanitaria para la ciudad, según un comunicado.

Luego de este incidente, el regulador de aguas SISS inició un proceso penal contra la empresa, lo que podría resultar en una multa de 600mn de pesos (US$882.000), la más alta permitida por la ley actual, anunció SISS.

Mientras tanto, el diputado Fidel Espinoza, que representa el distrito en el que se encuentra Osorno, dijo a RadioCámara que es probable que el Congreso establezca comisiones para investigar el incidente. Sin embargo, manifestó su rechazo a la cancelación de la concesión de Essal.

"Prefiero que esta empresa mejore sus sistemas [a raíz] de esta mala experiencia a que llegue una empresa más monopólica que ellos", sostuvo Espinoza, quien pidió también a Essal que incremente las inversiones en Osorno para prevenir futuras emergencias.

PROBLEMAS ANTERIORES DE ESSAL

Antes del actual derrame de petróleo, Essal había sido demandada dos veces por incidentes de contaminación, aunque en relación con la eliminación de aguas residuales en lugar de la calidad del agua potable.

En abril, el tribunal ambiental de Valdivia aprobó un acuerdo de conciliación entre la empresa y el municipio de Panguipulli sobre una demanda presentada por este último por la eliminación de aguas residuales sin tratar en el lago homónimo.

En el acuerdo, la empresa se comprometió a ampliar la capacidad de una planta local de tratamiento de aguas residuales y la red local de alcantarillado.

Mientras tanto, en junio de 2018, SISS emitió una multa de 400mn de pesos contra la empresa por las descargas de aguas residuales en el lago Llanquihue, cerca de la turística localidad de Puerto Varas, y también le ordenó presentar un plan de saneamiento.

El municipio de Puerto Varas presentó además una demanda contra Essal, que aún se encuentra en el sistema judicial, y solo la semana pasada se designó a un juez para redactar el fallo final, según muestran los documentos judiciales.

Si bien los datos de SISS sobre sanciones solo están disponibles hasta el 3T18, muestran que, además de los problemas de contaminación, Essal fue multada cinco veces en los primeros nueve meses del año pasado debido a infracciones de las normas de calidad del servicio, por lo que se le ordenó pagar un total de 543 unidades tributarias anuales, equivalentes a US$462.000.