OCDE entrega más recomendaciones a reguladores energéticos mexicanos

La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) presentó un informe de gobernanza sobre los organismos reguladores del sector energético mexicano en el que identifica los principales problemas de la implementación de la reforma energética nacional a partir de un estudio comparativo con otras cinco naciones.

El informe hace recomendaciones a la Agencia de Seguridad, Energía y Ambiente (ASEA), a la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH) y a la Comisión Reguladora de Energía (CRE), y cita ejemplos de éxito de Canadá, Chile, España, Noruega y Reino Unido.

El informe también brinda a los organismos reguladores mencionados la oportunidad de detallar los avances logrados desde que la OCDE emitió una serie de recomendaciones en febrero de este año, así como una iniciativa para un sistema de regulación energética en México, según un comunicado de prensa de la CRE.

Entre las recomendaciones realizadas en febrero se incluye promover la actividad del Consejo de Coordinación del Sector Energético (CCSE) para minimizar la redundancia de funciones, propiciar la creación de una "ventanilla única" para el trámite de licencias y permisos, modernizar el marco legal de la ASEA, elaborar presupuestos plurianuales e impulsar la autonomía fiscal para los tres organismos reguladores, lo que proporcionaría estabilidad y facilitaría la planificación a largo plazo, además de evitar presiones o influencias políticas innecesarias.

Las últimas recomendaciones fueron presentadas el jueves por Gabriela Ramos (foto), directora de Gabinete de la OCDE y sherpa ante el grupo del G20.

Si bien el estudio de febrero analizaba la gobernanza externa de los organismos reguladores, la segunda fase analizó su dirección interna, organización y desempeño individual.

Entre las recomendaciones presentadas en la segunda fase se encuentra una mayor coordinación entre los tres organismos y un proceso de fortalecimiento institucional para otorgar a ASEA un marco legal similar al que rige a la CRE y la CNH, así como la necesidad de mejorar los esquemas de financiamiento de las tres agencias.

La calidad de la gobernanza de los organismos reguladores de energía es de suma importancia para el país y, cuando tales instituciones y procesos reguladores funcionan adecuadamente, crean un círculo virtuoso que permite implementar políticas públicas con éxito, lo que refuerza la toma de decisiones regulatorias y la confianza en el sector energético del país, planteó Ramos durante la presentación de las recomendaciones.