Sector downstream colombiano planea invertir más de US$900mn en 2022

Las inversiones en la industria colombiana de combustibles líquidos se encaminan a repuntar un 12% el próximo año, impulsadas por la recuperación económica pospandémica del país, consigna un nuevo estudio.

Las actividades de refinación, transporte y distribución mayorista demandarán 3,7 billones de pesos (US$930 millones) en 2022, frente a los 3,3 billones de pesos de este año, según un informe de la Asociación Colombiana del Petróleo (ACP).

El gasto en refinerías sería encabezado por el proyecto de interconexión de crudo Reficar en Cartagena, además de iniciativas de tratamiento de aguas residuales, control de emisiones y mejoras de calidad en Barrancabermeja.

Las inversiones también son impulsadas por obras de poliductos, autogeneración fotovoltaica, sistemas de almacenamiento, adecuación de plantas de suministro a nuevas normas técnicas y mantenimiento de estaciones de servicio, entre otros proyectos.

Fuente: ACP

DEMANDA

La ACP prevé un incremento de 10% en la demanda de combustibles líquidos en Colombia para el próximo año tras un marcado endurecimiento de los confinamientos por coronavirus en 2021.

La entidad señaló que la demanda total de combustibles líquidos —gasolina, diésel y combustible de aviación— alcanzó un promedio de 302.000b/d en 2021, 27% más que el año anterior y ligeramente superior a la cifra de 2019.

“En general, la visión del sector es que, aún con la transición energética, los combustibles líquidos continuarán siendo la principal fuente de energía para el sector transporte, y que su demanda aumentará influenciada por el crecimiento económico del país”, señala el informe.

ACP basó sus proyecciones en una encuesta realizada en noviembre a miembros de la cadena de distribución de combustibles.

MÁS ALLÁ DE 2022

En el mediano plazo, las inversiones en el sector downstream colombiano estarán respaldadas por el sostenido crecimiento de la demanda de combustibles líquidos y las oportunidades para nuevas líneas de negocios, incluida la necesidad de producir combustibles con diferentes especificaciones, según la organización.

Fuente: ACP

Además, será necesario ampliar infraestructura como terminales de importación, poliductos y plantas de almacenamiento, mientras que los proveedores también invertirán en proyectos que les permitan cumplir con nuevas normas técnicas.

"Las anteriores tendencias estarán enmarcadas en un contexto de transición energética, la cual irá avanzando conforme a la realidad del mercado y con una participación preponderante de los combustibles líquidos y sus mezclas con biocombustibles", señaló la ACP.

"En particular, los distribuidores ven en la diversificación y diferenciación de energéticos una alternativa para competir, crecer en el mercado y aumentar la oferta de valor a los consumidores", agrega el informe.