Bajo la lupa: La evolución de las renovables de Chile en julio

La capacidad instalada de las energías renovables no convencionales en Chile creció a una participación de 24,2% del sistema total en julio, en momentos en que el país continúa en una rápida transición energética hacia fuentes más limpias.

Los últimos datos también muestran que la potencia fotovoltaica alcanzó el 48% de la capacidad instalada total de 5.928MW, según el regulador energético, CNE. La eólica es la segunda fuente más destacada con el 34% del total, seguida de las minihidráulicas (12%), biomasa (8%) y geotérmica (1%).

A nivel nacional, la potencia fotovoltaica representa ahora el 11,6% de la capacidad instalada total, mientras que la eólica da cuenta del 8,1%. Hay 29 proyectos adicionales en pruebas para comenzar a operar, los que sumarán 328MW en las próximas semanas.

La participación de la generación renovable en el sistema chileno se incrementó 6,9% en relación al mes anterior, y las energías renovables representaron el 19,3% de la generación total frente al 18,2% registrado en junio. Sin embargo, la proporción de generación se ha mantenido por debajo de los niveles observados a fines de 2019 y principios de 2020, cuando estas energías constituían más del 20% de la matriz energética nacional.

Aún así, la generación renovable total creció 3,2% en comparación con el mismo mes del año pasado. En tanto, la convencional, que agrupa la termoeléctrica y la hidroeléctrica, retrocedió 4,9%. La generación total se contrajo 3,4% debido al efecto que han tenido las medidas de confinamiento en la demanda.

El sistema eléctrico chileno aún se recupera de las consecuencias de la pandemia. En particular, los efectos sobre la demanda de energía, junto con las menores previsiones de crecimiento económico para 2020 y 2021, han llevado a las autoridades de CNE a cuestionar si es necesario seguir adelante con la convocatoria de suministro de 2019 que está programada para recibir ofertas el 18 de noviembre.

La convocatoria contrata suministro regulado que las distribuidoras de energía deben comenzar a proveer a partir de 2026. Ante los pronósticos de demanda más bajos, el sistema puede tener menos necesidad de nuevos proyectos en el corto plazo. Sin embargo, los estudios preliminares realizados sugieren que se justifica una nueva licitación, pero la cantidad de oferta a licitar podría cambiar.

Un total de 10 nuevos proyectos de energía renovable ingresaron a evaluación ambiental en julio, siendo el más grande el parque eólico San Andrés, de US$135mn y 130MW, en la Región de la Araucanía. En general, los nuevos proyectos suman 242MW de capacidad potencial.

El servicio de evaluación ambiental, SEA también otorgó 12 aprobaciones ese mes, agregando 11 parques fotovoltaicos y un parque eólico a la cartera nacional. El mayor proyecto aprobado fue la expansión de US$450mn y 489MW del parque solar Los Andes propuesta por AES Gener. Todos los nuevos proyectos suman 726MW para inversiones totales de casi US$669mn.

La cifra marca un hito para las recientes aprobaciones ambientales, siendo por lejos el mes más significativo en términos de inversión en los últimos 12 meses. Esto coincide con una oferta de las autoridades gubernamentales para acelerar el proceso de aprobación de proyectos pendientes como parte de un plan para impulsar la recuperación económica después de la crisis derivada de la pandemia.

El Ministerio de Bienes Nacionales también pretende apurar el ritmo de un proceso de licitación para ofrecer 32 áreas para el desarrollo de proyectos energéticos durante el resto del año, con una superficie total de 14.838ha. Todas se ubican en la norte del país, la que alberga algunas de las mejores condiciones solares del mundo.